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Todo lo que se necesita en un plato de fotografía

Todo lo que se necesita en un plató de fotografía

Puede parecer que al observar un plató de fotografía te resulte muy costoso por la cantidad de elementos que encontrarás en este.

Sin embargo, puedes conseguir  todo lo que necesitas para montar tu propio estudio de fotografía, reduciendo costes

¿Cómo hacerlo? Una de las claves es enfocarte en lo indispensable para perfeccionar tu trabajo, prescindiendo de artificios o cosas que puedes sustituir con un poco de creatividad e imaginación.

En este orden de ideas, te diremos qué hacer para lograrlo.

Elementos imprescindibles que debe tener un plató de fotografía

El espacio adecuado

Es de vital importancia la selección del mejor lugar, ya que será tu centro de trabajo. Por ello, debe contar con las siguientes características:

  • Amplitud: debe ser grande para que puedas introducir todos tus equipos, el personal y cuentes aún con el espacio suficiente a la hora de adaptar el espacio a cada sesión fotográfica, que sin duda son muy variables.
  • Altura del techo: además del ancho, también la altura del estudio es de suma importancia, ten en cuenta que entre los materiales a utilizar tendrás: focos, sombrillas, trípodes altos, etc. Y no querrás tener problemas a la hora de desplegarlos.
  • El fondo: es fundamental que el fondo sea blanco, bien sea una pared, una tela o pintura, esto sin contar que debe tener un fondo curvo entre la pared y el suelo, sin unión perceptible, es mejor visualmente.

La iluminación

La fotografía se basa, principalmente, en el juego con la iluminación y el color.  En un estudio es vital contar con más de una fuente de luz de diversas intensidades. Te sorprenderán los resultados que obtendrás al mezclarlas.

Esto viene a ser más bien una técnica, producto del uso de una serie de elementos.

Para obtener los mejores resultados en tus trabajos fotográficos, es necesario disponer en tu estudio de los siguientes elementos:

  • Luz continua: se explica por sí misma, está encendida en forma continua, a diferencia del Flash y puedes ver en todo momento la iluminación que tendrá tu fotografía.
  • Flash externo: es un fogonazo de luz que usas sólo para resaltar ciertos aspectos que quieras en tu cámara. El flash externo suele ser pequeño, versátil y fácil de transportar.
  • Flashes de estudio: permanecerán en el estudio, debido a su tamaño y peso. Son de luz intensa, por lo que es necesario el uso de un difusor de la luz. Su mayor inconveniente es que no sabes cómo saldrá la toma con la luz del flash hasta que lo dispares.
  • Pantallas reflectoras: se usan para reflejar la luz, de acuerdo a la intensidad requerida  en un punto concreto. Estas suelen ser blancas para dispersar la luz, doradas para luces cálidas, plateadas, o negras, cada una de ellas cumplen una función distinta.
  • Sombrillas: no es más que un pequeño paraguas que rebota la luz del flash. La distancia en la que se coloca la sombrilla determina la intensidad de luz.
  • Fotómetro: este aparato te permite medir la luz en el estudio a fin de evitar que se estropeen tus fotografías.
  • Trípodes: es uno de los elementos más útiles para un fotógrafo al momento de proporcionarle estabilidad a la cámara, evitando movimientos que incidan en la calidad de la imagen de tu fotografía.

Esperamos que este artículo te sea de mucha utilidad, recuerda que hablamos de los elementos básicos necesarios para montar tu estudio fotográfico, los cuales combinados con las técnicas que ya manejas, te permitirán obtener las fotografías que has soñado.

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